Con veinte mesas temáticas en paralelo y dos conferencias magistrales, se inauguró el miércoles 26 de septiembre el V Congreso de la Red de Postgrado de Investigación Latinos en Administración y Estudios de la Organización- Pilares, el que se llevó a cabo hasta el sábado 29 del mismo mes. Organizado por la Universidad de Santiago de Chile, la Universidad Alberto Hurtado, la Universidad Santa María y la Red Pilares, el evento contó con destacados exponentes a nivel mundial en temas de administración, gestión del conocimiento, productividad, etnografía, cambio climático y prácticas organizacionales, entre otros.
El acto de inauguración fue presidido por el Vicerrector de Postgrados de la Universidad de Santiago de Chile, Cristian Parker, quién señaló estar complacido de que los presentes en la conferencia, hagan el esfuerzo de provocar una red de intercambio tan importante en la formación de capital humano avanzado para nuestro continente, sobre todo, a nivel de postgrado. «Eventos académicos como el que inauguramos hoy, ofrecen la oportunidad para estudiantes y académicos de compartir un espacio dedicado a la reflexión, al intercambio y a la divulgación, además de ampliar los escenarios de discusión de las temáticas sobre la administración y las organizaciones en América Latina», dijo Parker.
El comité organizador del congreso, compuesto por Gregorio Pérez Arrau, Pablo Isla Madariaga, Marcela Mandiola Cotroneo y Nicolás Ríos, indicaron sentirse orgullosos de recibir a la comunidad de estudios organizacionales latinoamericana en Chile. «La Red Pilares nos ha brindado una oportunidad inigualable, ser sede organizadora de la quinta edición de su congreso internacional, y con ello, integrarnos a esta activa y creciente colectividad», indicaron los organizadores.
Gregorio Pérez, académico de la Facultad de Administración y Economía de la U. de Santiago de Chile, dio a bienvenida indicando que lo que deben hacer como investigadores, es producir cambios en el mundo de las organizaciones, debido al rol social que tienen. «Nuestro trabajo tiene impacto social. En otras palabras, puede (y debe) producir cambios significativos en el mundo que nos rodea y particularmente, dada la materia de este congreso, en las organizaciones, en el mundo laboral y productivo. No podemos negar que las universidades, los centros de estudios, crean discursos y esos discursos crean realidades», señaló.
Por su parte, Pablo Isla, tuvo como misión instruir a los visitantes extranjeros sobre la historia de la ciudad de Santiago y cómo Chile es un país que está acostumbrado a sobreponerse a tragedias sociales y naturales. «El Barrio de la Estación Central, donde se ubica la Universidad de Santiago de Chile, ha sido parte de la historia. Este es un barrio donde se juntan muchas realidades. El progreso ha marcado a la USACH, pues junta a una villa habitacional, la Villa Portales, con una universidad. Esta fue, sin dudas, una apuesta de la sociedad chilena por brindar el mejor tipo de vivienda al trabajador(obrero), en el centro de la ciudad, no en la periferia; y al lado de este conjunto habitacional, construir una universidad, lo que da cuenta del esfuerzo por el progreso».
Marcela Mandiola, expresó que estudiar las organizaciones no es estudiar entidades monolíticas que están ahí y son de una sola forma, sino que tiene que ver con una nueva forma de articulación que pueda responder mejor a cómo va cambiando la realidad. «Por lo tanto este Pilares tiene formas nuevas de organización a sus versiones anteriores. Una de las primeras innovaciones tiene que ver con la conformación de un comité científico que funciona tras la conferencia y una nueva forma de postular las mesas de trabajo, que representan la vanguardia de estudios organizacionales que se realizan en la actualidad», dijo.
Finalmente, Nicolás Ríos explicó el programa de actividades del congreso, indicando que existen tres presentaciones por bloque y que se realizarán actividades paralelas que no interferirán en las ponencias programadas.
En esta oportunidad se reunió a más de 300 participantes provenientes de nueve países, agrupados en 20 mesas temáticas y sus más de 200 ponencias.
Algunas de las mesas temáticas fueron: «Subjetividades, identidades y practicas frente a la reorganización del trabajo en América Latina», «Diversidad y Diferencia(s) en el Trabajo y las Organizaciones: Experiencias, reflexiones y prácticas»; «Gestión del Conocimiento e Innovación en el contexto Latinoamericano: Experiencias, Limitaciones, Oportunidades y Desafíos»; «El proceso de managerialización de la sociedad»; «Reflexiones y experiencias sobre investigación y enseñanza de Estudios Organizacionales en América Latina»; «Mudanças no Trabalho e na Organização da Educação e da Cultura na América Latina»; «Nuevas formas de organizar el trabajo: el cambio tecnológico en el mundo del trabajo»; «Nuevos y Antiguos Desafíos en Economía Social: Re-entendiendo las Empresas Sociales y la Innovación Social ante el Cambio de Era» y «Prácticas organizacionales desde abajo y en defensa de modos de vida en su relación con la naturaleza», entre otras.
La jornada inaugural culminó con la conferencia de Mario Radrigán, académico del Departamento de Gestión y Políticas Públicas de la FAE U. de Santiago y director del Centro Internacional de Economía Social y Cooperativa (CIESCOOP), quién realizó la ponencia «La diversidad organizacional. Una mirada desde la economía social y solidaria».
En la oportunidad, Radrigán se refirió al llamado tercer sector de la economía, compuesto por sindicatos, mutuales, cooperativas, asociaciones gremiales, comunidades indígenas, entre otras. Aludió al desarrollo del pensamiento colaborativo y el cuestionamiento del pensamiento competitivo. Incluso destacó que, a través de estudios científicos de las distintas ciencias, se ha comprobado el éxito de la cooperación.
«La práctica habitual de la administración y de los estudios organizacionales, como también del ámbito del desarrollo organizacional, ha estado centrado en el contexto de empresas privadas de carácter mercantil. Cuando esta mirada se ha ampliado, lo ha hecho preferentemente hacia el ámbito de las administraciones públicas. Por ende, muchas veces las intencionalidades y las miradas han sido puestas desde la lógica de los dueños de las organizaciones, ya sean estos inversionistas, o empresarios o el Estado. Claramente lo anterior, es una perspectiva a lo menos sesgada», sostuvo Radrigán.