Una respuesta entusiasta por parte de académicas(os) de la UAH tuvo la invitación de la FEN a participar en el proyecto “El desafío de innovar para una mejor vinculación con los territorios: experiencias de Norte, Centro y Sur de Chile”, financiado por la Dirección de Vinculación con el Medio de la UAH, que será ejecutado en conjunto por la Universidad Alberto Hurtado (UAH), la Universidad de La Serena (ULS) y la Universidad Austral de Chile (UACh).
Con una metodología grupal, se realizó – el pasado jueves en la sede de la Facultad de Economía y Negocios (FEN-UAH) – el taller informativo sobre el proyecto “El desafío de innovar para una mejor vinculación con los territorios: experiencias de Norte, Centro y Sur de Chile”. La actividad la dirigió la coordinadora del proyecto, Carolina Jerez, a la cual fueron invitados académicos y académicas de la UAH y profesionales que están ejecutando proyectos territoriales – al alero de la UAH – financiados por distintas entidades gubernamentales.
El objetivo del taller fue incentivar la participación activa en la materialización de este proyecto, que, de cierta manera, es inédito en su doble naturaleza pues es fruto de la adjudicación de fondos de la 1ª Edición Concursable de la Dirección de Vinculación con el Medio (VcM) de la UAH, en cuya ejecución están comprometidos 4 estamentos de tres universidades del país: la FEN-UAH; Vinculación con el Medio (VcM), de la Universidad de La Serena (ULS); el Centro de Emprendizaje (CEM) y el Centro de I+d+i Kelluwen, ambos de la Universidad Austral de Chile (UACh).
“El sentido del proyecto es generar un espacio de experimentación donde podamos conocer herramientas para vincularse con el territorio desde las metodologías participativas o ágiles. Compartir experiencias, conocer por qué son importantes, cuáles son las herramientas. Puede ser una meta – metodología o algunas herramientas concretas”, explicó Jerez. La meta es lograr plasmar, en una malla curricular, innovación teórica y práctica para fortalecer competencias laborales de los estudiantes de Pregrado, de tal manera que como profesionales luego puedan vincularse estrechamente con las necesidades y preocupaciones de la comunidad, siendo así agentes de cambios sociales: “La idea es, finalmente, diseñar una experiencia de aprendizaje para los estudiantes. En el fondo, ¿qué cursos tenemos que diseñar? para que los estudiantes puedan fortalecer sus competencias de empleabilidad y salir a trabajar al territorio siendo un aporte a la sociedad”, precisó Jerez.
En el taller se fijó el cronograma de las etapas del proyecto. Y tras el término, las y los asistentes quedaron satisfechos por los alcances de la propuesta, confirmando su participación en el equipo ejecutor de las tres universidades. Así lo manifestó, por ejemplo, Carolina Arredondo, académica del Departamento de Filosofía de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la UAH: “Lo que me motivó a asistir y participar en el proyecto es, inicialmente, esta transversalidad de universidades con distintas realidades y de cómo estas experiencias, vivencias, este compartir las herramientas metodológicas podemos también acercar a nuestros estudiantes a través de la colaboración mutua y de la bidireccionalidad a los territorios. Es esencial que ellos, en su proceso de formación, se acerquen a los territorios desde distintas visiones para que eso también lo puedan proyectar tanto en sus prácticas como en sus experiencias laborales una vez que egresen de la universidad”.
Claudia Fuenzalida, coordinadora de experiencias laborales de Educación Diferencial, de la Facultad de Educación de la UAH, resaltó la importancia de manejar: “Herramientas para movilizar a los estudiantes que quieran participar en el medio, en el territorio. Nuestros estudiantes en este momento con la pandemia están como muy pragmáticos y centrados en que quieren aprobar, quieren terminar y se olvidan de esa misión más social que tenemos que es volver a la sociedad”.
René Cifuentes, coordinador territorial norponiente del proyecto FEN, financiado por el Gobierno Regional (GORE) Metropolitano (que busca fomentar, a través de la innovación colaborativa, la autogestión económica de mujeres en 34 comunas de la RM) destacó la necesidad de iniciativas como estas porque: “A los estudiantes les hace falta conocer y sensibilizarse con la realidad. Así es que estas metodologías les van a hacer muy bien. Esperable que se apliquen en los cursos, en las carreras y se haga harto terreno con los estudiantes. Eso, sinceramente, creo que les puede cambiar hasta la vida, porque les va a cambiar el enfoque, primero de la mirada del mundo, pero muy importante también desde lo profesional, cuando ellos ya se titulen de sus carreras. Esa conexión con la realidad no la van a olvidar nunca y les va a hacer más sentido su trabajo e incluso, pienso en que pueden transformarse en aportantes a construir una mejor sociedad”.
Camila Tapia, profesora de Lengua y Literatura y ex alumna del Magíster en Didáctica en Lenguaje de la UAH, también se sumó a esta experiencia: “Hacen falta espacios donde podamos colaborar entre docentes y con otros agentes, en función de trabajar hacia una educación que esté más vinculada con los territorios y de entender que el conocimiento no es un conocimiento por qué sí y que hay aprenderlo y reproducirlo, si no que nosotros tenemos que generar conocimiento, pero a partir de ponerlo al servicio de la comunidad. Me parece súper interesante la propuesta, tengo hartas expectativas”.
Mauricio Araneda, director de Vinculación con el Medio y Proyectos (VcM) de la FEN, afirmó que este proyecto: “Sintetiza una palabra clave: integración, a través del intercambio de experiencias. La política de vinculación con el medio que tiene nuestra universidad se hace operativa con este tipo de proyectos que son instancias de diálogos entre actores internos y externos […]. Este aprendizaje en común puede hacer que la capacidad de birediccionalidad, de involucramiento, de integración crezca y eso es producto del aprendizaje, en este caso, entre universidades para la creación finalmente de un proyecto común”.