Bajo el alero de la Dirección Nacional del Servicio Civil (Servicio Civil) se inauguró la Mesa de Trabajo intersectorial y tripartita que elaborará el manual para prevenir la violencia laboral de género en el Sector Público, proceso que será acompañado por un equipo de la FEN-UAH. Participan en esta instancia representantes de servicios de la Administración Centralizada del Estado, de organizaciones sindicales del Sector Público, y de la OIT, quienes aportarán los insumos para sentar los lineamientos de este compendio. Así, el Estado de Chile como empleador adelanta la reflexión en torno a lo que será la nueva normativa una vez promulgado el Convenio 190 de la OIT sobre la violencia y acoso en el mundo del trabajo.
El pasado miércoles, en las dependencias de la Dirección Nacional del Servicio Civil (Servicio Civil) se llevó a cabo la primera reunión de la Mesa de Trabajo intersectorial, que tendrá la misión de elaborar un manual que dé cuenta de medidas tendientes a prevenir la violencia en los espacios de trabajo, en particular la de género, en el ámbito del Sector Público, proceso que será acompañado por la asesoría técnica de un equipo de la FEN. La metodología de trabajo comprende seis etapas:
- Levantamiento de insumos entregados por las organizaciones participantes
- Sistematización del material recogido
- Trabajo de análisis por grupo
- Articulación de los acuerdos y lineamientos
- Presentación de la propuesta
- Revista para el próximo 28 de junio
En el encuentro compartieron sus miradas desde su propio quehacer institucional representantes del Servicio
Civil; Subsecretaría del Trabajo; Superintendencia de Seguridad Social (Suseso); Instituto de Seguridad Laboral (ISL); Subsecretaría de la Mujer y Equidad de Género; Contraloría General de la República (CGR); Organización Internacional del Trabajo, OIT Oficina Cono Sur y dirigentas sindicales de la Asociación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF). La FEN estuvo representada por el director de Vinculación con el Medio y Proyectos (VcM), Mauricio Araneda; la académica Ana María Fernández, a cargo de la asesoría; y Consuelo Garnica, profesional del proyecto “Fomento a la Igualdad de Género en el Trabajo”.
Esta Mesa da continuidad al trabajo que vienen realizando de manera conjunta la FEN y el Servicio Civil, en el marco de un convenio de cooperación que suscribieron en el año 2016 en materias de diseño e implementación de políticas y prácticas de gestión y desarrollo de las personas, en tópicos de género, diálogo social, prevención del maltrato y acoso laboral y sexual, entre otras. “El trabajo en conjunto con la Alberto Hurtado tiene su historia […]. Tenemos una ruta de trabajo. Y ahora, continuamos con este manual que viene a ser también un tremendo aporte desde la perspectiva que cada una de las instituciones pioneras en estas materias realizan […]. Trabajar con universidades de este prestigio, de esta extensión, viene también a ponerle el punto neutro desde las distintas miradas, porque la contribución es para el Estado. Entonces, bienvenido el trabajo con una universidad y que sea ésta”, así lo señaló Delia Cerda, jefa de Desarrollo y Programa del Servicio Civil.
En tanto, el director de VcM, Mauricio Araneda, destacó que este tipo de cooperación expresa claramente el sello social de la FEN- UAH puesto en el desarrollo de políticas públicas que promuevan el bienestar para toda la sociedad, en particular a los más vulnerables: “La realización de este Manual forma parte de los compromisos de sustentabilidad con una iniciativa anterior que ejecutamos con el financiamiento de la Unión Europea. Además, este trabajo fortalece el Modelo de Personas del Sector Público que fue diseñado por nuestra universidad y es parte del rol rector del Servicio Civil que este año cumple 20 años de existencia como institución pilar de la modernización del Estado que para nosotros parte en las personas”.
Sobre la importancia de hacer un manual, Karen Jiménez, consultora del área de Desarrollo y Programa del Servicio Civil, encargada de esta mesa, resaltó que estos formatos comprenden una cobertura más amplia: “Un procedimiento aplica específicamente en cierto ámbito de acción. En cambio, el manual permite poner contexto y puede ser aplicado transversalmente a todos los servicios públicos. Los procedimientos son más específicos y aplican solamente a cada institución que lo dicta. Por lo tanto, un manual nos parece una muy buena oportunidad para generar conocimiento y generar esta Mesa, de poder aprovechar el conocimiento que tiene la academia, en este caso la Universidad Alberto Hurtado, de poder investigar experiencias comparadas, de mirar cómo se está haciendo o se ha resuelto en otros países”.
Especial relevancia cobra en este proceso el Convenio 190 de la OIT sobre la violencia y acoso en los espacios de trabajo, ratificado por el Estado chileno el pasado 8 de marzo. Se espera que en los próximos meses sea promulgado en el Diario Oficial, entrando así en vigencia su aplicación. En este contexto, Jiménez dijo que con este Manual van ya adelantando un trabajo que comprenderá la actualización acorde a lo que dictará la nueva norma chilena basada en este Convenio: “Este manual es como una primera entrega preparatoria para lo que pueda venir, porque cambiar normativas, son cambios sustantivos, que son más lentos. Nos vamos adelantando y preparando el camino con este manual para los cambios sustantivos que se nos vienen”.
Patricia Roa, oficial de Programación de la OIT Cono Sur, en el marco del Convenio 190 celebró la constitución de esta mesa: “Nos parece una muy buena iniciativa que adelanta la reflexión del Estado como empleador, en diálogo con sus representantes, asociaciones de funcionarios para ir acordando entonces cuál es este nuevo marco de prevención. Luego tendrá una segunda fase de actualización cuando el Estado cuente, como empleador, con nuevas normas para prevenir, sancionar, reparar y restituir los derechos de las y los funcionarios que hayan sido vulnerados”.
Al respecto, explicó que una vez que sea promulgado en el Diario Oficial: “Se abre un año para todos los países que lo ratifiquen, en el que adecúen sus leyes, sus normas administrativas y también sus políticas públicas para que, cumplido el año, empiece el cumplimiento cabal de su implementación […] Por lo tanto, el Estado y sus trabajadores, también los empleadores y trabajadores del sector privado, y las distintas instituciones tienen que prepararse”. El Convenio, subrayó, abre otras manifestaciones de la violencia de género, por ejemplo, la violencia económica.