El artículo analiza el impacto económico y social de la violencia prolongada en Colombia, destacando cómo el conflicto armado, potenciado por el narcotráfico, redujo en un 30% el PIB per cápita entre 1976 y 1993. Utilizando el método de control sintético, estima cómo habría sido el desarrollo económico sin el conflicto. Más allá de las cifras, resalta los efectos devastadores en cohesión social, capital humano y confianza institucional. La violencia, además de limitar el crecimiento, ha perpetuado desigualdades. El estudio subraya la necesidad de instituciones inclusivas, políticas públicas integrales y estrategias regionales para evitar que la historia de violencia se repita.
Por: Carlos Díaz, académico y director Magíster en Economía, Facultad de Economía y Negocios, UAH y Jorge Orozco, Intern Country Management Unit – Grupo Banco Mundial en Colombia, magíster en Economía, UAH.
Publicado en revista Observatorio Económico Nº 199, 2025.